Los diamantes rosas son extremadamente raros y codiciados: una mina australiana que ya cerró ha sido la fuente del 90% de las piedras preciosas de color. Los ejemplares rosas pulidos de mayor calidad pueden venderse por decenas de millones de dólares. Sin embargo, un descubrimiento realizado en la misma zona podría ayudar a encontrar nuevos yacimientos de estas joyas, según los investigadores.
Los científicos que estudian el yacimiento de diamantes de Argyle, en Australia Occidental, donde se encontraba la mina, afirman que ahora comprenden mejor las condiciones geológicas necesarias para que se formen los diamantes rosas y otras variedades de color, según un estudio publicado este martes
Con 170 quilates, se encontró el que podría ser el diamante rosa más grande encontrado en 300 años
Al utilizar láseres para analizar minerales y rocas extraídas del yacimiento de Argyle, los investigadores descubrieron que el yacimiento rico en diamantes rosas se formó durante la desintegración de un antiguo supercontinente, llamado Nuna, hace unos 1.300 millones de años.